Campano (Samanea saman)

     

 

  

 

     

                          Prompt para la descripción de especies

 

Dominio:	Eukaryota
Reino:	Plantae
Subreino:	Tracheobionta
División:	Magnoliophyta
Clase:	Magnoliopsida
Orden:	Fabales
Familia:	Fabaceae
Subfamilia:	Mimosoideae
Género:	Samanea
Especie:	Samanea saman
Descrita por	Carl Linnaeus 1753

 

 ETIMOLOGÍA, DETERMINANTE Y AÑO DE DETERMINACIÓN

Etimología del Género "Samanea": El género "Samanea" lleva el nombre de un médico y botánico italiano del siglo XVIII, Giovanni Zanoni, quien se conocía como Samane. El género fue nombrado en su honor. La "a" al final de "Samanea" es una terminación típica para nombres de género en la taxonomía botánica.

Etimología de la Especie "Saman": La etimología de la especie "saman" proviene del nombre común en inglés "rain tree" (árbol de la lluvia) o "monkey pod," ya que es conocido por proporcionar sombra densa y fresca bajo su dosel. En algunos lugares, también se le llama "Samán," que se asemeja al nombre del género "Samanea." Sin embargo, ten en cuenta que la etimología de las especies puede variar según la región y la cultura.

Determinante y Año de Determinación: La especie Samanea saman fue inicialmente descrita y determinada por Carl Linnaeus en 1753 en su obra "Species Plantarum," donde la clasificó y la nombró formalmente.

RAÍZ

Raíz Principal: El árbol de samán generalmente desarrolla una raíz principal que crece en dirección vertical hacia abajo. Esta raíz principal suele ser gruesa y fuerte, lo que le permite anclar el árbol en el suelo y proporcionar estabilidad.

Raíces Secundarias: A partir de la raíz principal, se desarrollan numerosas raíces secundarias que se extienden hacia los lados y se ramifican en el suelo. Estas raíces secundarias son más delgadas que la raíz principal y ayudan al árbol a absorber agua y nutrientes del suelo.

Raíces Adventicias: Los árboles de samán también pueden desarrollar raíces adventicias, que son raíces adicionales que surgen de las partes aéreas del tronco o las ramas que tocan el suelo. Estas raíces adventicias pueden contribuir a la absorción de agua y nutrientes, así como a la estabilidad del árbol

TALLO

 El tronco del árbol de samán es grande, recto y cilíndrico, y puede alcanzar alturas impresionantes que van desde los 15 a los 25 metros o incluso más, dependiendo de las condiciones de crecimiento. Su diámetro puede variar ampliamente, pero a menudo es considerable, especialmente en árboles maduros.

 La corteza del árbol de samán es lisa y de color gris claro en árboles jóvenes, pero a medida que el árbol envejece, se vuelve más rugosa y agrietada. La corteza puede desprenderse en placas delgadas y escamosas.

 El árbol de samán tiende a tener una ramificación bastante baja en el tronco, con ramas horizontales que se extienden desde un punto relativamente bajo en el tronco principal. Esto da como resultado un dosel amplio y denso que proporciona sombra efectiva.

HOJAS

 Las hojas del árbol de samán son compuestas, lo que significa que están formadas por múltiples folíolos o unidades individuales. Estos folíolos están dispuestos en un patrón característico a lo largo de un eje central.

 Los folíolos del árbol de samán son pinnados, lo que significa que se organizan en pares a lo largo del raquis central de la hoja. Estos pares de folíolos están dispuestos en un patrón opuesto en el raquis.

Los folíolos son de forma ovalada a oblonga y tienen un extremo puntiagudo. Cada folíolo mide alrededor de 2 a 4 centímetros de largo y 1 a 2 centímetros de ancho. Los folíolos tienen márgenes lisos y son de color verde oscuro en la parte superior y más claro en la parte inferior.

La superficie de los folíolos es generalmente lisa y brillante, lo que les da un aspecto atractivo. La superficie de la hoja puede ser algo coriácea al tacto.

FLORES

Inflorescencias: Las flores del árbol de samán se agrupan en inflorescencias esféricas y densas que se desarrollan en las axilas de las hojas. Estas inflorescencias son llamativas y pueden medir de 5 a 12 cm de diámetro.

Color de las Flores: Las flores individuales del árbol de samán pueden variar en color, y las inflorescencias pueden contener flores de varios colores. En general, las flores pueden ser de color blanco, rosa claro o incluso ligeramente amarillas. El color específico puede variar según la variedad y las condiciones de crecimiento.

Forma de las Flores: Cada flor individual del árbol de samán tiene una forma de campana o embudo con cinco pétalos. Los pétalos son amplios y a menudo muestran un patrón de rayas o vetas de un color ligeramente diferente.

Tamaño de las Flores: Las flores del árbol de samán son relativamente grandes, con un diámetro que oscila entre 1 y 2 cm.

FRUTOS

Los frutos del árbol de samán son vainas alargadas y planas que se desarrollan a partir de las flores después de la polinización. Las vainas son de color verde en su etapa temprana y luego maduran a un color más oscuro, a menudo volviéndose de un tono marrón o marrón oscuro a medida que envejecen.

 Las vainas son de forma plana, oblonga y alargada, con una longitud que varía generalmente entre 10 y 20 cm. La anchura de las vainas es relativamente estrecha en comparación con su longitud.

 Las vainas del árbol de samán tienen una textura exterior coriácea y a menudo se vuelven quebradizas y se abren en segmentos a medida que maduran.

 Cada vaina contiene varias semillas. Estas semillas están rodeadas por una pulpa suave y a menudo dulce que es comestible.

SEMILLAS

 Las semillas del árbol de samán son de forma ovalada a elíptica. Tienen un tamaño relativamente grande en comparación con otras semillas y suelen medir alrededor de 1,5 a 2,5 centímetros de largo y 1 a 1,5 centímetros de ancho.

 Las semillas son de color marrón oscuro a negro, lo que les confiere un aspecto característico.

 La superficie de las semillas es generalmente lisa y brillante. Tienen una cubierta dura y resistente que protege el embrión en su interior.

 En el interior de cada semilla del árbol de samán se encuentra el embrión, que está rodeado por una capa de pulpa suave y comestible. La pulpa tiene un sabor agradable y a menudo es dulce, lo que la hace apetitosa para la fauna local y los seres humanos.

MODIFICACIONES O ESTRUCTURAS MODIFICADAS

Follaje Denso: Una de las características más notables del árbol de samán es su follaje denso, que proporciona sombra efectiva bajo su dosel. Las hojas compuestas y pinnadas se disponen de manera que forman una extensa área de sombra.

Nyctinastia y Seismonastia: Aunque no se trata de una modificación estructural, el árbol de samán exhibe comportamientos notables en sus hojas. Puede realizar movimientos de cierre durante la noche y en respuesta a la lluvia, lo que se conoce como nyctinastia y seismonastia, respectivamente. Este comportamiento ayuda a la planta a conservar la humedad y protegerse de la pérdida de agua y daños causados por la lluvia.

Sistema Radicular Superficial: Si bien no es una estructura especializada en sí misma, las raíces del árbol de samán suelen desarrollarse cerca de la superficie del suelo, lo que lo hace más susceptible a la caída en condiciones de viento fuerte. Esta característica puede considerarse una adaptación a la captura eficiente de agua en suelos pobres y secos.

ORIGEN Y DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA

Origen: El árbol de samán es nativo de las regiones tropicales de América, en particular, de América Central y América del Sur. Su área de origen abarca desde México hasta Brasil y se extiende por toda América Central y las regiones tropicales del norte de Sudamérica.

Distribución Geográfica: Debido a su valor ornamental, sombreado y su resistencia a diferentes condiciones, el árbol de samán se ha introducido y naturalizado en muchas otras partes del mundo. Se ha extendido a través de la propagación por semillas y se encuentra en varios países tropicales y subtropicales de Asia, África, el Caribe, las islas del Pacífico y otras regiones.

IMPORTANCIA ECOLÓGICA

Sombra y Hábitat: El denso dosel del árbol de samán proporciona una sombra eficaz y crea un microclima más fresco debajo de él. Esto es beneficioso para muchas especies de flora y fauna que buscan refugio en su sombra y aprovechan su hábitat, lo que lo convierte en un importante refugio para la biodiversidad.

Humedad del Suelo: El árbol de samán puede contribuir a la retención de humedad en el suelo debido a su follaje y su sistema de raíces extenso. Esto ayuda a prevenir la erosión del suelo y a mantener la humedad en el entorno circundante.

Fijación de Nitrógeno: Al igual que otros miembros de la familia Fabaceae, el árbol de samán es capaz de fijar nitrógeno atmosférico en el suelo a través de una asociación simbiótica con bacterias en sus raíces. Esto enriquece el suelo con nitrógeno, beneficiando a otras plantas cercanas y mejorando la calidad del suelo.

Alimentación de Fauna: Los frutos y semillas del árbol de samán son una fuente de alimento para una variedad de animales, como aves, murciélagos y pequeños mamíferos. Estos animales ayudan en la dispersión de las semillas, lo que contribuye a la regeneración del árbol y la biodiversidad.

USOS PARA EL HOMBRE

Sombra y Paisajismo: El árbol de samán se utiliza ampliamente en paisajismo y jardinería debido a su atractiva forma y su capacidad para proporcionar sombra densa y refrescante. Se planta en parques, jardines, avenidas y áreas públicas para crear zonas sombreadas.

Madera y Construcción: La madera del árbol de samán es apreciada por su durabilidad y es utilizada en carpintería y construcción. La madera se emplea en la fabricación de muebles, elementos arquitectónicos y estructurales, y en la producción de artículos de artesanía.

Forraje Animal: En algunas regiones, las hojas y los frutos del árbol de samán se utilizan como forraje para alimentar al ganado y otros animales domésticos. Su valor nutricional los hace adecuados para la alimentación animal.

USO CULTURAL O ANCESTRAL

Mitología y Creencias Locales: En algunas culturas indígenas y comunidades locales, el árbol de samán ha sido objeto de mitos y creencias religiosas. En algunas áreas, se le atribuyen propiedades espirituales y místicas.

Usos Medicinales Tradicionales: En muchas culturas, diferentes partes del árbol de samán, como la corteza y las hojas, se han utilizado en la medicina tradicional para tratar una variedad de afecciones. Se han elaborado infusiones y tónicos a partir de estas partes del árbol.

Alimentación Tradicional: En algunas regiones, las semillas y la pulpa de los frutos del árbol de samán se han utilizado en la alimentación tradicional. Se consumen frescas o se integran en platos culinarios locales.                                                                                                                                                                                                          

 Baquero Flórez

Luis Ángel

10º  D